La construcción de personaje desde el interior es la
posesión de serlo. Una posesión que lo
abarca todo. Guiada y controlada por un timón en aguas profundas.
¿Qué sucede con la construcción exterior? Consiste en un
rito para Ser. Finalmente, termina siendo, como en la construcción desde el
interior. La memoria emotiva y el fetichismo conducen exactamente al mismo
resultado.
Podría existir una diferencia en los límites que traza cada
una. ¿Con el desarme del personaje cesan las fuerzas dionisíacas? En cambio,
¿Dónde se cortan las cadenas del interior? Mi experiencia no ha ido tan lejos.
¡Pero que siga el sacrificio!
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